Para
no estar diferenciando del arbitraje masculino del femenino, debo decir que en el
arbitraje femenino, pocas veces ocurren las cosas que voy a comentar.
Antes
de introducir la tecnología al arbitraje en el fútbol, los árbitros y sus
equivocaciones resistían mayor tolerancia, y exigía continuas capacitaciones,
sin embargo, no era suficiente. Con la llegada del VAR, el gol y la mano
detectados mediante un mensaje al reloj del juez y un chip, al contrario de
“facilitar” la labor, hicieron crecer las dificultades en el arbitraje. Pero el
factor humano también los ha hecho meterse en problemas, el árbitro
influenciado por el contexto del partido se convierte en un conciliador,
cuando su función es la de juez. Además, de la pobre colaboración de los
jugadores que, interpretan las reglas a su conveniencia o adoctrinados por sus
técnicos.
Pero
todo esto pasa porque la FIFA es un gigante temeroso de que su gran negocio se
salga de sus manos. Ellos que se creen los todos poderosos, los intocables a
los cuales no se les puede decir ni sugerir nada, cual dictador. Se encargaron
de introducir la tecnología de mal manera, así como cuando haces una
actualización de tu software sin los requisitos necesarios.
Muchos
otros deportes han introducido la tecnología, pero ellos si pensando en mejorar
la calidad del juego, el espectáculo y hacerlo más justo.
Quiero
confesar que cuando escuche por primera vez, que la FIFA introduciría el video,
todo pensé menos que sería el foco de las polémicas. La misma palabra lo dice Video Asistencia Arbitral. Si bien es
correcto que el VAR no debe usarse para cada jugada ocurrida en el campo de
juego, técnicos y jugadores hacen que siempre se piense en que es necesario que
intervenga, más aún cuando “inteligentemente”, al menos en Europa, el cuerpo
técnico tiene a disposición una Tablet, ósea, para poner en evidencia las imprecisiones
del árbitro.
Pero
esto tiene una razón, los jugadores y técnicos de fútbol profesional no son
honestos y, peor aún ante cualquier decisión que afecte los intereses de uno u
otro equipo ponen en cuestionamiento la ética profesional del árbitro. Por experiencia propia sé que, en las etapas de
formación, algunos entrenadores enseñan a sus dirigidos a ser deshonestos
confundiéndolo con ser más astutos. Todo lo contrario, al espíritu del deporte.
Y,
viendo los fallos de criterio y de procedimiento arbitral en la Copa América y
la Eurocopa 2024, me viene rondando una idea que pondría el mundo del fútbol y
sobre todo el arbitraje patas arriba, pero que en mi concepto haría mejoras
significativas. Llamar a rueda de prensa a los árbitros para que ante la prensa
den las explicaciones pertinentes por jugadas puntuales que hayan sido foco de
polémicas durante el partido. Son los únicos que salen impunes del campo de
juego.
Hipotéticamente
presento este escenario: Copa América 2024, partido de fase de grupos Argentina
vs Chile, pisotón de De Paul a Suazo y Eurocopa 2024 cuartos de final Alemania
vs España, falta de Toni Kroos a Pedri. ¿Creen ustedes que, si el árbitro
central de estos partidos, sabiendo que al final del partido deben ir a
explicar sus acciones, habrían decidido tan equívocadamente, ambas situaciones?
De una cosa estoy seguro, el reglamento no tiene agujeros, los agujeros los
crea el árbitro al interpretarlo a su amaño.
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